martes, 5 de marzo de 2013

TEORÍA MUSICAL



Lectura Musical

El pentagrama
Usamos el pentagrama para escribir la música




Escribimos las figuras musicales sobre las líneas y los espacios del pentagrama:






Dependiendo de su posición sobre el pentagrama podemos conocer la nota musical que representan.

NOTA: La palabra pentagrama es de origen griego: penta significa cinco y grama escrito.

Las claves
En todo pentagrama lo primero que encontraremos es una clave.

Existen varias claves. Las más utilizadas son la clave de sol:




La clave de fa:



La clave de do:



La clave de sol es utilizada por instrumentos agudos como el violín, la flauta, la trompeta y por otros no tan agudos como la guitarra, se suele utilizar en la segunda linea del pentagrama. 

La clave de fa es utilizada por instrumentos graves como el contrabajo, el violonchelo, el fagote y el trombón, se suele colocar en la cuarta linea del pentagrama. 

La clave de do es utilizada por instrumentos como la Viola,  el trombón alto y la voz humana, se suele colocar en la tercera y cuarta linea pero puede colocarse en cualquier linea del pentagrama.

Es importante saber la clave utilizada al momento de leer la música para poder conocer el nombre de las notas.



Nombre de las notas

Antes de ver como escribimos las notas musicales en el pentagrama, repasemos el nombre y orden de ellas.
Nuestro sistema musical tiene siete notas naturales doremifasolla si y cinco alteradas do# - reb / re# - mib / fa# - solb / sol# - lab / la# - sib. El orden de las notas es  Estas notas corresponden a las teclas blancas del piano:








La clave de sol
A continuación pueden ver la nota musical representada por cada una de las líneas y espacios de un pentagrama con clave de sol. Noten que la primera línea (la línea inferior) corresponde a la nota mi y el primer espacio a fa. En otras palabras la notas musicales siguen sobre el pentagrama (línea-espacio-línea) el orden natural (doremifasolla si). Fíjese que podemos escribir debajo de la primera línea (línea inferior) y sobre la quinta línea (superior):





Las líneas adicionales
Además de escribir sobre los espacios y líneas del pentagrama, podemos también añadir líneas adicionales para escribir notas más agudas o graves:






El do sobre la primera línea adicional inferior equivale al do central del piano.








La clave de fa
A continuación pueden ver la nota musical representada por cada una de las líneas y espacios de un pentagrama con clave de fa. Hemos incluido las líneas adicionales.




El do más agudo que aparece sobre la primera línea adicional superior es el do central.



La clave de do
A continuación pueden ver la nota musical representada por cada una de las líneas y espacios de un pentagrama con clave de do. Hemos incluido las líneas adicionales.





Memorización de notas
Para poder leer la música es imprescindible saber de forma rápida la nota que corresponde a cada espacio y línea del pentagrama. Esto se logra con mucha práctica y paciencia.
No obstante en un principio puede ayudar memorizar el orden de las notas en los espacios y líneas. Por ejemplo en la clave de sol, las notas sobre las líneas son misolsire fa. Sobre los espacios son falado mi:








En clave de fa:





Uso combinado de clave de sol y fa

Combinando un pentagrama con clave de sol y otro con clave de fa podemos escribir cualquier nota, desde la más grave hasta la más aguda: 





El último do de clave de fa (el más agudo) y el primero de clave de sol son la misma nota. El do central.
La música para piano se escribe normalmente usando un pentagrama en clave de sol y otro en clave de fa.

La notación rítmica
Ya sabemos como se especifica la nota que se debe tocar, pero ¿cómo especificamos su duración?
Para entender esto debemos conocer las figuras musicales y las indicaciones de compás.



Las figuras musicales
Las figuras musicales nos permiten especificar la duración de un sonido. A continuación pueden ver las figuras, sus nombres y valores:






El compás
Muchas veces podemos encontrar patrones rítmicos en la música que escuchamos. Generalmente podemos agrupar los tiempos o pulsaciones en grupos de 2, 3 ó 4.
Por ejemplo, cuando escuchamos un vals, sentimos un patrón rítmico de tres tiempos. Durante todo el transcurso podemos sentir que los patrones rítmicos están basados en este 1, 2, 3. Existen compases de 2, 3 y 4 tiempos. Incluso, aunque menos comunes, encontramos compases de 5 ó 7 tiempos. Para indicar el compás usamos dos cosas: la indicación de compás y las líneas divisorias. 














La indicación de compás
El compás se indica al principio de una obra musical usando dos cifras:




La cifra superior indica el número de tiempos que tiene el compás, 3 en este caso.
La cifra inferior nos indica la figura que ocupa cada tiempo. En la tabla a continuación pueden ver la relación entre figuras y cifras: